REVISTA INNOVA ITFIP, 11 (1). 91-115. DIC. 2022
En 50 años, Singapur pudo volcar todo su sistema económico y social en contra de la corrupción, y hoy se
ubica en el puesto número 3 en el Rankin de percepción de la corrupción de la reconocida ONG Transparencia
Internacional.
¿Qué tan lejos está Colombia de Singapur, teniendo en cuenta que, el país ha iniciado el camino normativo
hacia la prevención de este tipo de actos? ¡La respuesta se puede vislumbrar en esta contundente sentencia!
¡La corrupción es inherente al ser humano! Esta fue una de la frase utilizadas por uno de los involucrados en
uno mayores escándalos de corrupción en Colombia. Guido Nule, hizo esta mención en un cruce de correos
electrónicos, en la que denostaba del sistema económico y de contratación del país, y dejaba entrever que no
había esperanza alguna puesto que, la sociedad viene con un chip insertado en el ADN, del cual no se puede
desprender, y al cual, se llegaría necesariamente, esto es, a cometer actos de corrupción.
La necesidad de la ética en los negocios
La ética en Colombia
Pasando de un continente a otro, en una latitud más próxima se encuentra en una línea totalmente contraria al
caso
Percepción de Corrupción (IPC) 2018 de Transparencia Internacional. (Mejía Restrepo, 2019).
En la más reciente edición de este índice, el país pasó de 37 a 36 puntos sobre 100, siendo 0 (corrupción
elevada)
(transparencia elevada), y
medición. (Mejía Restrepo, 2019).
Es
reflexionar sobre el desenlace (Mejía Restrepo, 2019), que han tenido las múltiples empresas que se han visto
afectadas
hacerle frente a dicha situación.
Por el contrario, “…existen otras empresas que, sin tener escándalos de corrupción de por medio han tomado
acciones decididas para jugar limpio. Éstas tienen un papel importante en la sociedad pues pueden influir o
encabezar un cambio positivo, dando ejemplo y exigiendo un comportamiento ético a otras empresas que hacen
parte de su promesa de generación de valor”. (Mejía Restrepo, 2019).
Muchas son las empresas que han optado por este camino, el camino de la prevención, antes que la corrección.
Cuando ya se han presentado los hechos, es muy tarde para lamentarlo. Una reflexión acerca de esta situación
se halla en la Fábula de Rafael Pombo, el gato Michín. Pombo, R. (2013).
Cuenta la fábula que, un gato quería volverse malo, y se fue de la casa pasando por encima de sus padres, y
pasó tales situaciones desafortunadas que vuelve como perro entre las piernas, lamentando haberse ido, jurando
ser bueno.