REVISTA INNOVA ITFIP, 10 (1). 97-120. JUN. 2022
condiciones tanto a países en desarrollo y en los países en vías de
desarrollo, perpetuando una
desventaja. Con relación a lo anterior, Zambrano Carbonell (2016) citando a Merino
y Vargas
(2011)
enfatiza

que,

la

correlación

entre

actividad

emprendedora

y

crecimiento

económico

es
negativa
en

los

últimos

años,

y

positiva

para

los

países

desarrollados

porque

en

los

países
desarrollados
los

emprendedores

surgen

basados

en

la

innovación

mientras

que

los

otros,

sus
motivaciones están dadas por necesidad, por lo que conlleva que la creación de nuevas empresas
no
traiga

consigo

el

autoempleo.

Por

consiguiente,

la

pertinencia

de

la

metodología

empleada
radica en ser una herramienta para medir y monitorear, más allá de sus limitaciones.
Aproximaciones a la definición del emprendimiento
El
concepto

de

emprendimiento

no

se

agota

en

la

definición

de

una

teoría,

ni

tampoco

en

la
delimitación del término emprendedor, dado que sus variados enfoques en el significado lo llevan
a considerar como una palabra polisémica. Por tal razón en principio es conveniente que se aborde
desde la economía en donde se asume el emprendimiento como aquella labor que refina una idea
creativa
y

la

adapta

a

una

oportunidad

de

mercado

(Tibaduiza

&

Calderón,

2020),

donde

los
recursos, autoempleo y estrategia llevan a un crecimiento rápido por medio de la innovación en la
creación de bienes o servicios.
Al describir el fenómeno del emprendimiento, es necesario e inevitablemente asumir para revisarlo
las dos perspectivas trabajadas por los diferentes autores, y de los cuales se nutre la academia e
investigación para continuar construyendo el concepto en la actualidad. Por un lado, es importante
abordarlo desde el individuo como emprendedor, en donde se destacan sus características y por el
otro lado, incluye la evaluación de las características del entorno emprendedor. Éste último es parte
integral,
pues

se

debe

observar

desde

el

enfoque

económico

y

sociocultural,

como

proceso

y
proyecto de emprendimiento empresarial.
Paturel (1997) citado por Marulanda Valencia (2014, p. 90) presenta un esquema que denomina la
coherencia del proyecto, en la cual, menciona que para que sela creación de una empresa deben
confluir tres factores tales como: las aspiraciones o motivaciones del creador, sus competencias y
recursos y el ambiente o entorno. Desde esta perspectiva, se considera el emprendimiento como
creación
de

empresas,

en

tanto

que

el

mercado

ofrece

unas

oportunidades

que

pueden

ser
aprovechadas
por

los

emprendedores

para

crear

empresas.

Veciana

(2005),

dice

que

son

5

los
elementos
que

median

en

la

creación

de

empresas

y

están

dados

por:

la

identificación

de

una
oportunidad empresarial, los factores de producción, el mercado al cual está dirigido, la estrategia
de
combinación

de

los

recursos

y

llegar

al

mercado

objetivo,

y

como

quinto

elemento

está

el
empresario con una motivación, preparación y habilidades adecuadas para la toma de decisiones.