REVISTA INNOVA ITFIP, 10 (1). 51-67. JUN. 2022
para una industrialización “desde abajo”, o sea, que surge a partir del impulso local y regional de
los
pequeños

y

medianos

productores,

a

los

cuales

se

les

dan

las

posibilidades

de

crecer

e
incrementar su productividad; lo contrario, es apoyar una industrialización “desde afuera” a cargo
principalmente de transnacionales y sus agentes internos o intermediarios con industrias de alta
tecnología y densidad de capital, pero desintegradas de las cadenas productivas nuestras, porque
si
el

parque

industrial

se

orienta

como

un

aparato

destinado

exclusivamente

a

facilitar

la
instalación de la gran industria, entonces lo que se está haciendo es acelerar más aun la diferencia
de
oportunidades

con

respecto

al

pequeño

productor,

el

cual

es

considerado

un

usuario
antieconómico para los parques industriales, y son excluidas.
Así
mismo,

Vergara

Gómez,

L.

(2018),

agrega

que

la

falta

de

organización

de

la

pequeña

y
mediana industria se encuentra en desventaja frente a los tecnócratas que manejan los parques
industriales, ante el panorama de la automatización de las actividades futuras de la competencia
con la gran industria. En su opinión, los parques industriales, además de dar ubicación a la gran
industria,
deben

también

buscar

la

instalación

de

la

pequeña

y

mediana,

promoviendo

su
integración
y

encadenamiento

y

dando

las

facilidades

para

que

esta incorporación

sea

lo

más
simple posible, quizás mediante programas menos rígidos, que tenderían a borrar un poco los
límites entre “el parque” y el resto de la ciudad, haciendo que este tenga un entorno más permeable
y que coexistan mecanismos de aceptación. Solo con el enfoque que se plantea, se podrá decir que
los parques industriales, están aportando realmente al ordenamiento territorial u urbano de los
países con economías emergentes y a sus localidades, ya que solo así se están encarando de frente
dos de los problemas estructurales: el del mosaico de suelos de carácter mixto vivienda-taller y el
problema de la especulación de la tierra urbana.
Para Vergara Gómez, L. (2018), el control de la tenencia de la tierra junta con la necesidad de
canalizar el desarrollo científico y tecnológico de un país o región constituye la clave para la
implementación de un parque industrial y es la variable que abre las puertas a todos los demás
aspectos, porque estos, buscan satisfacer y
vincular el quehacer de la interacción universidad -
empresa-estado. Finaliza diciendo; lograr la relación estrecha entre el desarrollo tecnológico de
las empresas y los parques industriales, representan la expresión del espíritu emprendedor de un
pueblo y de su cultura, lo que a la postre también puede ser una realidad concreta como alternativa
de solución a los problemas relacionados con el desafío intelectual y el desarrollo de valores como
la dignificación del trabajo y la contribución a la creación de una economía más solidaria.
Iglesias Piña, David y Carreño Meléndez, Fermín (2017), dicen que la agrupación de empresas en
forma
de

parques

industriales

no

sólo

contribuye

a

disminuir

la

presión

ambiental,

sino

que
también
incide

favorablemente

en

el

desarrollo

de

la

localidad

y

la

región

donde

están
establecidas. Desde esta perspectiva, dicha agrupación empresarial sigue considerándose como
uno
de

los

principales

instrumentos,

en

términos

de

costos

y

efectividad,

para

promover

la